Boeing 777-31H(ER) de la aerolínea Emirates despega del Aeropuerto Internacional de Los Ángeles, California. 13 de enero de 2021.AaronP / Bauer-Griffin / GC / Gettyimages.ru
La aerolínea Emirates, con sede en Dubái (Emiratos Árabes Unidos), defendió esta semana su decisión de continuar con los vuelos a Rusia en tanto el Gobierno de su país no lo prohíba.
En una entrevista a CNBC, el presidente y director ejecutivo de la aerolínea, el jeque Ahmed bin Saeed Al Maktoum, dijo que no había recibido ninguna instrucción de las autoridades locales para cesar las operaciones, y en tanto esta postura no cambie, Emirates continuaría operando sus vuelos a Moscú y San Petersburgo.
“Estamos conectando a las personas entre ambos países”, indicó el directivo. “Realmente no deberíamos confundirnos entre las decisiones de las personas y las del Gobierno“, subrayó.
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En respuesta al operativo militar ruso en Ucrania, la Unión Europea, Estados Unidos y Canadá cerraron su espacio aéreo para todos los aviones rusos. Rusia por su parte respondió prohibiendo la entrada en su espacio aéreo a las aeronaves de 37 países.
De este modo, aerolíneas internacionales como British Airways y Air France-KLM suspendieron los vuelos a Rusia, mientras que Aeroflot, la principal aerolínea rusa, detuvo todos sus vuelos internacionales, exceptuando los que van a Bielorrusia.
Estas prohibiciones han traído dificultades para las aerolíneas internacionales, que se han visto obligadas a repensar sus rutas y alargar algunos trayectos, aumentando así el tiempo de los vuelos y el consumo de combustible. Pero los más afectados son, sin dudas, las personas que se enfrentan a la escasez o a inexistencia un transporte que los lleve a sus destinos, así como al incremento de los precios de los pasajes.
En medio de este escenario, Emirates se ha mantenido como una de las pocas opciones para aquellos que desean viajar desde o hacia Rusia.
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