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Win Butler, fundador de la banda de indie rock Arcade Fire, ha sido acusado por cuatro personas de conductas sexuales inapropiadas y de acoso sexual entre 2015 y 2020, según lo ha revelado una investigación de la publicación musical Pitchfork.
Se trata de tres mujeres y de una persona de género fluido con edades comprendidas entonces entre los 18 y 23 años, que alegan que el cantante estadounidense —de 34 años en 2015—, abusó sexualmente de ellas, aprovechándose de su fama.
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Una de las víctimas de Butler, la persona de género no binario, denunció que el músico le había agredido sexualmente en dos ocasiones. En cuanto a las tres mujeres, alegan que sus relaciones con el cantante eran inapropiadas debido a la diferencia de edad y a “una dinámica de poder desequilibrada” entre la celebridad y sus fanáticos. Como parte del acoso, denuncian el envío de mensajes sexuales no deseados y de videollamadas por parte de Butler.
En un comunicado, Butler –que está casado con su compañera de banda Régine Chassagne– negó las acusaciones y aseveró que “todas estas relaciones fueron consentidas”. No obstante, el líder de Arcade Fire admitió sentirse “muy apenado” por el hecho de haber podido herir a alguien “con su comportamiento”.
“Nunca he tocado a una mujer en contra de su voluntad”
En una declaración a Pitchfork, un representante del cantante admitió que Butler había tenido interacciones sexuales con cada una de las cuatro personas que lo acusan, aunque insistió en que en ningún caso fueron iniciadas por el músico, que habría obtenido un explícito consentimiento de las presuntas víctimas para cualquier práctica sexual.
“Nunca he tocado a una mujer en contra de su voluntad, y cualquier insinuación de que lo he hecho es simplemente falsa”, reiteró Butler en un comunicado. “Niego con vehemencia cualquier insinuación de que haya forzado a una mujer o exigido favores sexuales. Eso, simple e inequívocamente, nunca ocurrió”, manifestó.
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El cantante quiso aclarar los detalles de las acusaciones y dijo que en aquel momento estaba pasando por un periodo de alcoholismo y depresión.
“Sigo aprendiendo de mis errores y trabajando duro para convertirme en una mejor persona, alguien de quien mi hijo pueda estar orgulloso […]. Siento no haber sido más consciente [y] seguiré mirando hacia delante y curando lo que se pueda curar, y aprendiendo de las experiencias pasadas”, afirmó Butler.
“Sé que nunca ha tocado, ni tocaría, a una mujer sin su consentimiento y estoy segura de que nunca lo hizo”, aseveró por su parte la esposa del músico. “Ha perdido el rumbo, pero ha encontrado su camino de vuelta. Lo amo y amo la vida que hemos creado juntos”, señaló.
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