El Departamento de Defensa de EE.UU. frenó las entregas de aviones caza F-35 tras darse cuenta de que los magnetos de sus turbinas están hechos con una aleación china, comunica Bloomberg este miércoles.
El Pentágono “pausó temporalmente la recepción del nuevo modelo de F-35 para asegurar la conformidad del programa” con las exigencias “respecto a los metales especializados”, explicó el portavoz del departamento, Russell Goemaere. La decisión se deriva de una regulación especial que prohíbe usar en la técnica militar estadounidense metales y aleaciones provenientes de ciertos “países específicos”. La lista incluye a China, Rusia, Irán y Corea del Norte. Goemaere aseguró que la pausa no incidirá en el funcionamiento de los cazas ya entregados a los aliados, porque “el magneto no transmite información ni perjudica la integridad del avión”.