El líder izquierdista Gustavo Petro sigue encabezando las encuestas rumbo a las elecciones presidenciales de Colombia, aunque todavía no con una intención de voto suficiente para ganar en primera vuelta.
A un mes de los comicios, el candidato de la derecha, Federico Gutiérrez, avanza como el segundo favorito y confía en achicar la diferencia gracias a las alianzas que está logrando y a la intensificación de la campaña presencial en todo el país.
El próximo 29 de mayo, 38,8 millones de colombianos están convocados a elegir presidente y vipresidente entre una lista de ocho fórmulas. Para ganar ese día se necesita obtener el 50 % más uno de los votos. De lo contrario, los dos primeros lugares se enfrentarán en una segunda vuelta prevista para el 19 de junio. Quien salga victorioso asumirá el 7 de agosto y se convertirá en el sucesor de Iván Duque.
Petro, un economista de 62 años que fue alcalde de Bogotá, senador y candidato presidencial en 2010 y 2018, se erigió como favorito en todos los sondeos desde que comenzaron las precampañas y se postuló por la coalición Pacto Histórico. Hoy, los sondeos lo ubican con preferencias que van del 34 % al 46,2 %.
🇨🇴 ¡Nueva encuesta sobre Colombia! ✨✨Exclusivo informe preelectoral ✨👀 Gustavo Petro encabeza las preferencias electorales con un 43% de los votos.🔍 El actual presidente, Iván Duque, registra una imagen negativa del 83%. https://t.co/GsqqolqJXUpic.twitter.com/jgznYnJBVv
— CELAG (@CELAGeopolitica) April 21, 2022
Su compañera a la vicepresidencia es Francia Márquez, una abogada y activista ambiental afrocolombiana de 39 años que se convirtió en la sorpresa de las elecciones internas de aspirantes presidenciales que se realizaron el pasado 13 de marzo y en las que, sin que nadie lo esperara, fue la tercera candidata más votada, solo detrás del propio Petro y de Gutiérrez.
En esa jornada decisiva, el Pacto Histórico obtuvo cinco millones de votos, lo que representó un récord para la izquierda en uno de los países tradicionalmente más conservadores de la región.
La derecha
Gutiérrez, por su parte, es un ingeniero civil de 47 años que fue alcalde de Medellín y que encabeza la coalición conservadora Equipo por Colombia. “Fico”, como se le conoce popularmente, eligió como su compañero de fórmula a Rodrigo Lara Sánchez, exalcalde de Neiva e hijo de Rodrigo Lara Bonilla, el exministro de Justicia que en 1984 fue asesinado por órdenes del fallecido líder del Cártel de Medellín, Pablo Escobar.
Las encuestas les otorgan una intención de voto que oscila entre el 21,8 % y el 25 %, lo que los ubica en segundo lugar y con las más firmes posibilidades de disputar la segunda vuelta frente a Petro-Márquez.
Tenemos metas claras y reales, no estoy dispuesto a mentir para ganarme un voto. Soy optimista del potencial de nuestro país y nuestra gente, vamos a crecer y a sacar de la pobreza a los colombianos que más nos necesitan.🇨🇴🇨🇴#FicoPresidentepic.twitter.com/HzvsqOEw9A
— Fico Gutiérrez (@FicoGutierrez) April 13, 2022
En las internas del 13 de marzo, los cinco candidatos que buscaban la postulación de Equipo por Colombia obtuvieron 3,9 millones de votos, es decir, más de un millón menos de lo alcanzado por Pacto Histórico. Aunque es una referencia, no es definitiva porque lo que resta de las campañas pueden modificar el panorama electoral.
La víspera, por ejemplo, Gutiérrez obtuvo un respaldo decisivo porque el Partido Liberal, que encabeza el expresidente César Gaviria (1990-1994), decidió apoyar su candidatura luego de semanas de especulación, ya que un sector de esa fuerza política prefería sumarse a Petro.
Esta definición impacta en el escenario electoral, porque en 2018 el apoyo de los liberales fue uno de los factores decisivos para que Duque le ganara a Petro en la segunda vuelta.
Más candidaturas
Además de Petro y Gutiérrez, hay otras seis fórmulas presidenciales, aunque casi ninguna supera los dos dígitos en sus intenciones de voto.
La excepción es el exalcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, quien se postuló bajo las siglas de la Liga de Gobernantes Anticorrupción, que él mismo fundó, que se define en el centro político y que lleva a Marelen Castillo, una bióloga sin antecedentes en cargos públicos, como aspirante a la vicepresidencia. Según los sondeos, las preferencias electorales a su favor oscilan entre el 9,3 % y el 12 %.
No se necesita gastar millones cuando un candidato llega al ❤️. RODOLFO HERNÁNDEZ SERÁ PRESIDENTE pic.twitter.com/waCXl5x3VI
— Rodolfo Hernández Presidente 🇨🇴 2022 – 2026 (@RHpresidente) April 27, 2022
Con menores expectativas avanzan Sergio Fajardo, un matemático de 65 años, exalcalde de Medellín y exgobernador de Antioquía, que compite al amparo de la coalición centroizquierdista Centro Esperanzas. Su compañero a la vicepresidencia es el exgobernador del Chocó, Gilberto Murillo. Ambos reúnen entre el 7,2 % y el 9,5 % de intención de voto.
Muy detrás, con niveles que no superan el 2 %, está Ingrid Betancourt, la exsenadora que estuvo secuestrada durante más de seis años por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), justo cuando encabezaba su primera candidatura presidencial. Dos décadas más tarde, volvió a postularse por Verde Oxígeno, el partido que creó en 1998. El coronel José Luis Esparza Guerrero es su candidato a la vicepresidencia.
Tuvimos la oportunidad de recorrer las calles de Cartagena y dialogar con la comunidad para escuchar sus propuestas e inquietudes. Estamos aquí para hacer de nuestro país, una nueva Colombia.#IngridPresidenta#JaqueALaCorrupción#Cartagenapic.twitter.com/Jpl0U6cfDP
— Ingrid Betancourt Pulecio (@IBetancourtCol) April 23, 2022
Por último, compiten las fórmulas John Milton Rodríguez-Sandra de las Lajas, por el partido Colombia Justa Libres; Enrique Gómez Martínez-Carlos Cuartas, de Movimiento Salvación Nacional, y Luis Pérez-Ceferino Mosquera, de Colombia Piensa en Grande.
Panorama
Las presidenciales se llevarán a cabo un año después de las históricas protestas que iniciaron en Colombia el 28 de abril de 2021 en repudio a una reforma tributaria que Duque presentó ante el Congreso bajo el nombre de Ley de Solidaridad Sostenible y que, entre otras medidas, pretendía aumentar el IVA en productos y servicios y ampliar el padrón de contribuyentes.
De manera similar a lo que ocurrió en Chile, la magnitud de las movilizaciones sorprendió a la clase política y se convirtió en una grave crisis para Duque, cuya popularidad se derrumbó a los niveles más bajos de su gestión, en medio de las constantes denuncias de violaciones a los derechos humanos contra manifestantes que fueron reprimidos de manera violenta por las fuerzas de Seguridad. Los meses aciagos de marchas dejaron un saldo de decenas de muertos y cientos de heridos.