“Varias decenas” de civiles abandonaron el área de la planta siderúrgica de Azovstal, situada en la ciudad de Mariúpol, a lo largo de cinco días, durante una operación coordinada por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), las partes del conflicto y la ONU.
Según el comunicado de CICR, más de 100 personas, entre ellas algunos heridos, llegaron este martes a la ciudad ucraniana de Zaporozhie mediante un convoy de autobuses, ambulancias y vehículos privados. “Otras personas de la planta se fueron en otra dirección; el CICR no organizó ni acompañó estos movimientos civiles”, precisó el organismo.
“Para que esta operación tuviera éxito, el CICR ayudó a las partes a identificar puntos concretos que finalmente acordaron entre ellos. Esos detalles incluían la hora, la ubicación, la ruta de evacuación y otros detalles logísticos, así como exactamente quién podría ser evacuado voluntariamente”, reza el comunicado.
Este lunes, el Ministerio de Defensa de Rusia informó que a lo largo del fin de semana anterior 126 civiles fueron evacuados desde Azovstal y de los edificios cercanos. El pasado 21 de marzo, Rusia abrió un corredor humanitario permanente en Azovstal para garantizar la evacuación de los civiles y su salida de las instalaciones a partir de las 14:00 (hora de Moscú) en cualquier dirección.
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