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En medio de una profunda crisis de suministros energéticos y los altos precios de la energía, el Reino Unido está tratando de asegurar el abastecimiento a largo plazo de gas natural licuado (GNL) de los productores estadounidenses. Trascendió, a través de fuentes anónimas, que el Gobierno británico está buscando propuestas de exportadores de GNL para abastecer su economía con acuerdos que se extiendan hasta 20 años, informa Bloomberg.
A diferencia de otros países de Europa, el Reino Unido no depende del gas ruso, pues dispone de los suministros noruegos y aprovecha también su propia producción. Sin embargo, la competencia por el combustible, agravada luego de las sanciones a Rusia por el conflicto en Ucrania y la llegada de la temporada fría, expone al país a una crisis que amenaza con extenderse más allá del invierno.
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Según Bloomberg, el Gobierno británico anunció el miércoles un plan con un costo estimado de unos 45.000 millones de dólares que podría limitar los precios mayoristas del gas durante seis meses. Los hogares y muchas empresas se están enfrentando a facturas de servicios públicos inasequibles por el aumento récord de los costos del combustible este año. El panorama está dibujando una posible recesión.
Por su parte, Fred Hutchison, presidente del grupo de cabildeo de la industria estadounidense LNG Allies, comentó: “claramente, el Gobierno de Truss está comprometido […] en asegurarse suministros a largo plazo a precios asequibles”. “Es mejor que las otras naciones europeas aceleren el paso. Lo que queda en Estados Unidos está casi agotado”, señaló.
Un portavoz del Departamento de Negocios, Energía y Estrategia Industrial del Gobierno británico se negó a comentar el asunto. Las conversaciones aún se encuentran en las primeras etapas.
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