El ciudadano británico Aiden Aslin, condenado el pasado 9 de junio a pena de muerte por el Tribunal Supremo de la República Popular de Donetsk por participar como mercenario en los combates en Donbass, confesó en un mensaje grabado que se arrepiente de haberse unido a las actividades militares en el lado ucraniano.
“Me arrepiento de haber formado parte del Ejército ucraniano, pero pienso que para muchas personas no será suficiente, porque todos pensarán que estoy intentando hacerles sentir lástima por mí”, reconoció.
Aslin explicó que la semana pasada Donetsk se convirtió en objetivo de un “tremendo” ataque lanzado por la parte ucraniana que se sintió, entre otros barrios de la ciudad, en el centro de prisión preventiva donde actualmente se encuentra encarcelado. “Lo vi con mis propios ojos”, agregó.
“Realmente pensaba que, al final, moriré a manos de Ucrania“, afirmó Aslin. “Es como si el Dios me hubiera salvado la vida hasta ahora para que pudiera ver cómo es la verdad y tomar el camino de redención“, dijo el mercenario británico.
Asimismo, reveló que espera poder apelar su veredicto, pues considera el fallo “demasiado grave”. “No he hecho nada para merecerme una pena de muerte, porque soy tonto e ingenuo”, concluyó.
- Aslin, de 27 años, se encontraba entre el millar de militares que se rindieron en abril en Mariúpol. El británico, que se había unido a la división militar ucraniana en 2018, luchó antes en las filas kurdas en Oriente Medio.
- En el mismo juicio, el tribunal de la república condenó a pena capital a otros dos mercenarios extranjeros: el británico Shaun Pinner y el marroquí Saadun Braguim.
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