Militares ucranianos dispararon a un convoy de civiles que se movilizaba por una carretera en dirección a la ciudad de Járkov, asegura un hombre que iba en uno de los vehículos de la caravana, de unos 34 automóviles.
El testigo cuenta que antes de llegar a un puesto de control militar, a unos 100 metros, uniformados comenzaron a disparar en dirección a ellos. “La mayor parte del convoy pudo girar y retirarse a tiempo hacia [la ciudad de] Volchansk, pero los primeros cuatro vehículos fueron acribillados“, detalla.
El ataque dejó varios muertos y heridos. Entre los civiles que viajaban con él había en su mayoría mujeres y niños. Una anciana murió ante sus ojos, al igual que una amiga suya, a la que una bala que atravesó el parabrisas de su coche le impactó en la cabeza. “Salimos arrastrándonos bajo el fuego. Nos disparaban a bocajarro”, afirma.
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